La Música en las Primeras Etapas de la Vida…

• Un puente de comunicación, un puente para establecer los primeros vínculos.
• Un proceso de Interacción: facilita la relajación, el contacto, la expresión de estados emocionales, etc..
• Después del nacimiento, la reiteración de esa música oída anteriormente es una manera de mantener el vínculo, de que permanezca esa relación. La envolvente sonora. El cantarle canciones es mantener el puente musical.
• En el inicio aparece la respiración y el llanto; a partir del tercer mes el bebé emite sonidos. La madre que le habla y le va contando cosas que hacen, el proceso de subjetivación; la reiteración de sonidos, de ritmos, algo que se repite una y mil veces, (los sonidos que emiten los animales, las máquinas, etc…).
• Respiración, aire y vibración sonora. El descubrimiento de la voz y los sonidos más próximos. El niño va aprendiendo como es el mundo exterior y reconocer sus propios sonidos, y posteriormente aparecen las primeras palabras, aprenderá a nombrar las cosas.
• Una conexión con el mundo exterior y una conexión con el mundo interior.
• El sentirse sentido o sentirse conectado con el mundo exterior puede ayudarnos a entender como sintonizarnos con nosotros mismos.
• Los sonidos favorecen las dimensiones físicas, psicológicas y sociales. Desde áreas específicas cerebrales (o neuronales) se integrarían: las sensaciones corporales, las vivencias emocionales y los procesos de pensamiento. 
• Quizás es uno de los elementos más poderosos que tenemos para explorar el mundo de las emociones y los sentimientos, pues la música deja en nosotros, además de una percepción sensorial, una sensación impalpable y a la vez sumamente concreta. Las emociones forman parte integrante de la música, son la llave para entrar en una sensibilidad más refinada, que es portavoz de nuestra dimensión interior.
• A través de los diferentes elementos musicales (sonido, ritmo, melodía, armonía…) y mediante la escucha de audiciones, creación de canciones, la exploración instrumental, improvisación musical, creación y repetición de patrones rítmico- musicales, paisajes sonoros… partiremos de los primeros sonidos que un bebé escucha, como el latido del corazón de la mamá, el sonido de su voz, la respiración, los sonidos del entorno etc, para ir ampliándolo progresivamente a los propios sonidos (voz, cuerpo..).